martes, 9 de octubre de 2012

Las hojas regadas por el suelo y los archivos abiertos en la computadora me hacen preguntar ¿Para qué? ¿Para qué ensayar una y otra vez cada uno de los cuestionamientos de los autores? Cuestionamientos con respuestas imperfectas que sudan a miles de criticas que igualmente son imperfectas ¿Para qué? Para encontrar la ley coja que se maneja según al deseo del mayor egoísmo humano ¿Para qué? Para jactarnos de saber más frases o parrafos de memoría y autores no analizados y escupirlos como si su trabajo fuera un “si” mecanizado “es correcto” alabemos sin más ¿Para qué? Para detectar todas las estructuras creadas por y para el hombre, dando un supuesto orden a su mente y a su cuerpo en pro de un simbolismo que representa el valor de la vida ¿Para qué? Pregunto ahora y sin aliento.

1 comentario:

  1. Para què las joyas que cubren tu cuerpo???
    Para què el dinero de cien años de trabajo??
    Para què la fama de los intocables????
    Para què las falsas caras de lo cotidiano????

    Excelente!!!!!! Te quiero!!!!!!

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